Ud. está posiblemente enamorado y "vuela" de felicidad. En este preciso instante no quiero pensar en lo despreciable ni en lo bajo, es decir en el dinero, pero, esto es absolutamente en vano. Ya que bajo la influencia de los sentimientos es fácil cometer errores.
El amor afecta al cerebro y esto ha sido establecido por los científicos. En los enamorados, algunas regiones de la corteza cerebral funcionan de forma más activa, que en los que no están enamorados. Porque la ráfaga de actividad no siempre es beneficioso. No se debe de pensar, de ninguna manera, que el dinero no significa nada en las relaciones. Porque la cuestión financera ha destruido más de un par de enamorados. Trate de reflexionar si Ud. no comete uno de estos errores.
1. Ud. siempre paga por su pareja
¿A Ud. no le importa nada, porque desea mostrarle su generosidad y su preocupación por la persona amada? Por los deseos románticos, e incluso, por estos, ,no trate de mantenerla a su enamorada, porque esto puede ser peligroso. Muy pronto o más tarde uno de las parejas sentirá que le explotan y se ofenderá. O que una de las parejas comenzará a ejercer presión sobre la otra pareja, argumentando
que el que paga es el que manda.
Otra opción desagradable del desarrollo de los sucesos puede ser, que la pareja mantenida empiece a percibir a su ser querido como si fuera una alcancía móbil, y esto ya no tiene que ver nada con el amor.
La confianza y la preocupación es genial, por supuesto. Pero sólo si ambos no tratan de cometer errores en sus vidas. ¿Ud. está seguro que lo podrá? Demuestre su amor con sus acciones y obsequios, pero no asuma, de ninguna manera, los gastos de los demás.
2. Ud. se adapta a los hábitos de su pareja
La diferencia en los ingresos y, en relación al dinero, influye también en los hábitos. Porque algunas personas prefieren acumular el dinero y ahorrar cada centavo, ya que alguien puede gustarle vivir a lo grande. Cuando una de las parejas tiende a adaptarse a los hábitos de la otra parte, el resultado será más o menos.
Por ejemplo, supongamos que una pareja se va de vacaciones a un balneario turístico caro y que allí, la pareja adinerada viva como si no hubiese sucedido nada, y que la pareja pobre haga un régimen de dieta estricta de pan y agua. Como se sabe por el amor las verdaderas parejas se sacrifican, pero si esto lo hace sólo una de ellas, las relaciones amorosas terminarán. Porque Ud. arriesgará quedarse sin el amor y sin dinero.
3. Ud. no toma en cuenta las posibilidades financieras de su pareja
Si se considera que el dinero no juega ningún papel en las relaciones amorosas, puede surgir la tentación de que, en general, no se tenga en cuenta la cuestión financera. A veces, esto puede llevar a situaciones paradójicas, cuando, por ejemplo, la pareja vuela por las vacaciones con diferentes aviones y viven en diferentes hoteles, debido a que para uno de ellos esto resulta ser caro.
No es necesario llevar esto hasta lo absurdo. Porque sería suficiente que le importe un bledo de que nuevamente vaya al restaurante solo, porque este lugar es demasiado caro para la persona amada. Si es así, muy pronto Ud. irá a cenar sin su ser querido, porque se irá de Ud.
4. Cuando Ud. se convierte en un avalista (o garante) para su pareja
Confiarle a su ser querido es necesario, pero es tonto participar desempeñando el rol de garante, cuando las relaciones aún se encuentran en la etapa turbulenta del amor. Porque el dinero puede echar a perder todo.
Supongamos que una de las parejas se compra un coche, un apartamento o casa o un equipo electrónico caro, pero que los adquiere para sí misma.
Los préstamos de dinero se otorgan por varios años, y puede resultar incierto que vivirán juntos todo ese tiempo. Y si Ud. decide separarse rápidamente, entonces, su ex-pareja dispondrá de un instrumento de presión sobre Ud. Porque al banco le importará un bledo que el amor pasó, por lo que Ud. tendrá una crisis en sus relaciones, porque decidió vivir por separado. Es decir que el banco le reclamará a Ud. el dinero.
Por esta razón es que Ud. debe tomar préstamos sobrios, es decir, dejando de lado las relaciones amorosas.
5. Uds. no discuten el presupuesto general
Porque, según Uds., no pueden vivir separados, por lo que deciden vivir juntos. Es decir que depositan su dinero en un sola caja (o cuenta bancaria), como lo hace una familia correcta.
En sí, el presupuesto general de la pareja sirve para comprobar la cordura y la confianza. ¿Seguro que Uds. están dispuestos a pasar por esto? Porque, incluso con un presupuesto a medias, es decir, cuando la pareja se une para hacer frente a las necesidades comunes, y el resto de los ingresos se gasta a discreción, no siempre resulta posible decidir y aceptar si el dinero se gastó adecuadamente.
Al inicio de las relaciones, la pareja no se preocupa en los gastos en pequeñeces: se gasta el dinero común en la alimentación, productos y enseres domésticos. Pero, después, resulta que alguien "se come" una gran parte del presupuesto. Por ejemplo, cuando a una de las parejas le encanta los productos marinos, y que la otra pareja sufra de alergia y que para ella le sea suficiente los cereales. Se inician los recálculos y comienzan los reproches.
Con el fin de no discutir por los montos de los ingresos y los gastos, es necesario saber de dónde provienen los ingresos y cómo se gastan. Es imprescindible distribuir los gastos al detalle y seguir estrictamente este plan trazado. Porque esto resulta ser mejor que después averiguar, quién gastó más.
6. Ud. oculta las deudas a su pareja
Esto es una idea chocante, incluso si Ud. actúa de buena fe (por ejemplo, porque Ud. no desea que se preocupe su pareja). Porque conjuntamente con las deudas tiene que ocultar los ingresos, y la falsedad nunca sirvió de un buen fundamento para las relaciones sólidas. Las deudas pasadas echan a perder los planes de la familia, si Ud. recurre al banco para pedir préstamos con condiciones favorables.
7. Ud. pide un préstamo para su boda
¿En serio? Mejor no lo haga, sencillamente no lo haga de ninguna manera!.
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Mauritz
(ref.: Lifehacker.ru (Anastasía Pivovárova), [1])
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